Director: Jason Stutter.
Guión: Kevin Stevens.
Protagonistas: Jed Brophy - Jeffrey Thomas - Laura Petersen.
Un grupo de investigadores paranormales y una jóven médium llegan a una casa abandonada de la que al parecer ocurren sucesos extraños, al parecer una entidad se hace presente todas las noches con algún propósito, pero los escépticos investigadores encuentran explicaciones lógicas ante los eventos bastante sutíles, que al parecer nada tienen que ver con actividad paranormal, pero algún secreto oculta la solitaria casa, algo que no puede ser develado.
El tema de actividad paranormal al parecer es el preferido por los realizadores del género del horror, y ahora "The dead room" logra más bien un efecto tibio porque rompe con algunos de los clichés a los que estábamos acostumbrados, aquí no hay grandes efectos especiales, ni actuaciones sobresalientes, y quizás la explicación tiene que ver con que está basada en una historia real (vaya originalidad) ocurrida en Nueva Zelanda y de la que no se tienen mayores referencias y se trató de realizar algo menos espectacular por lo que se entiende por qué esta película es tan sencilla, la historia está llena de preguntas que los diálogos tratan de responder, por lo cuál todo es pura incertidumbre (recuerda mucho a la película "El ente" (1982) por su ritmo) pero lo más extraño es que por momentos logra mantener el interés cuyos efectos son casi tán sutíles que no se sabe si es por falta de presupuesto o porque trataron de darle el estilo de realidad más fidedigno posible, ¿o quizás dejaron lo mejor para el final? (Spoiler), cualquiera que sea el motivo, se deja ver así tranquilamente, con nulas pretenciones.
(Click sobre la foto para ver trailer)
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