EL PODER DE LA AMISTAD

Titulo: "Ponyo en el acantilado" ("崖の上のポニョ") (Gake no ue no Ponyo) (2008).
Director: Hayao Miyazaki.
Guión: Hayao Miyazaki.
Música: Joe Hisaishi.
Voces: "Ponyo" (Yuria Nara) - "Sosuke" (Hiroki Doi) - "Fujimoto" (Jòji Tokoro).

Conocido mundialmente como el Walt Disney Japonés, Hayao Miyasaki es pieza fundamental a lo que en animación convencional respecta (siendo los estudios Ghibli productora de casi la mayoría de sus películas), ya que ha podido rescatar como ninguno la esencia real infantil, ver sus películas resultan todo un mundo maravilloso que te transportan nuevamente a la infancia mas pura, ingenua y poética, y así lo ha retratado en películas tan inolvidables como “Tonari no Totoro” (Mi vecino Totoro) (1988), “Mononoke Hime” (La princesa Mononoke) (1997), “Sen to Chihiro no Kamikakushi” (El viaje de Chihiro) (2001), “Haru no ugoku shiro” (El castillo ambulante de Howls) (2004), y ahora nos deleita con “Gake no ue no Ponyo” (Ponyo en el acantilado) (2008) su nueva película donde cuenta la historia de “Sousuke” un niño de nueve años que vive cerca del mar junto con su madre y su padre (embarcado en alta mar desde hace un tiempo), un día jugando en la playa se encuentra con un extraño pez que pareciera inerte con la cabeza atascada en un tarro, la rescata, la mete en un balde y la bautiza como “Ponyo”, “Sousuke” se encariña rápidamente de la que pareciera es una prófuga de las profundidades del mar, cuyo poderoso padre utiliza sus recursos para hacerla regresar donde pertenece, pero el pez vuelve a escapar con la decisión de convertirse en humana y amiga de “Sousuke” para siempre, produciendo un cíclico cambio en la vida natural que podría hacer peligrar a la raza humana, haciendo que el cariño incondicional y puro de un niño sea puesto a prueba. Realizada con una sensibilidad solo percibida en las películas de Miyasaki y con un profundo mensaje reflexivo hacia el daño que estamos produciendo irremediablemente al ecosistema “Ponyo en el acantilado” es poesía, ternura y expresividad del mas alto nivel, jamás en una película infantil se han retratado a los niños tal cuales son, con sus manías, su fidedigna curiosidad y su eterno amor desinteresado que no dejara indiferente a ningún adulto y que también hará reír sanamente, convirtiéndose indiscutidamente en una película que quizás no olvides jamás, así como en algún momento olvidamos que todos fuimos niños alguna ves.