La Pérdida Del Espacio/Tiempo De Lynch

Título: "Erasedhead" (1977). Director: . Guión: David Lynch. Música: David Lynch. Protagonistas:  Jack Nance - Jeanne Bates -  Jack Fisk - Jennifer Lynch.

Sin lugar a dudas que David Lynch es todo un personaje de culto dentro de la industria cinematográfica actual. Aunque la obra de Lynch, va claramente, contra la corriente dentro de lo concretamente comercial.
Podríamos escribir durante horas para lograr siquiera entender algo de su creatividad retorcida. Pero por ahora, nos limitaremos a analizar brevemente la que es su obra más experimental hasta ahora.

Luego de ser rechazada por varias productoras, finalmente Erasedhead (1977) pudo ser realizada, casi como si fuera un examen de grado, más también, un aporte a la industria under de esos años, entre Éxtasis y LSD.
Con una puesta en escena alucinante, en un formato más cercano al cine experimental vanguardista. La Opera Prima de Lynch, es un dolor de cabeza para cualquier psicólogo.
En un ambiente que no tiene ni espacio ni tiempo, tenemos a personajes bastante perturbadores. Que no hacen otra cosa, que seguir confundiendo al espectador con rebuscados simbolismos y extrañas metáforas.
Y es que lo más notable de todo, es que se pueden interpretar de múltiples maneras posibles.
Un hombre de apariencia deprimida y ausente, vive una vida monótona y sin matices. Un día, recibe una noticia que hará replantearse su existencia en virtud de sus anhelos sepultados y sueños desintegrados.

Aquel hombre pareciera ser el Alter Ego de Lynch, sumido en un complejo universo de expresiones tanto surrealistas, como abstractos. Sin embargo, ilustra de manera notable, el significado de la falta de propósito en la vida (que, dependiendo del punto de vista, no tiene nada de malo). Así también una paternidad obligada, y desprovista de toda emoción. Y lo que pareciera ser aún más alucinante: el caminar por el borde entre la realidad y la imaginación más desquiciada.
Pero no todo son “buenas noticias”, además tenemos fantasías sexuales reprimidas, y una muy aberrante alegoría al aborto.
La genialidad de Lynch, para exponer cada uno de sus tópicos de interés, sin necesidad de caer en emociones y representaciones baratas. Parecen un baile macabro hacia lo más profundo de la psiquis humana. En general, nos hace pensar, que todo es una invitación bizarra hacia lo más oculto que yace en la mente de un hombre, que pareciera no temer a la locura más oscura y desoladora.  

Es absurdo seguir describiendo el inicio (ya que es su primera película) del universo de Lynch. Principalmente, porque queda vulnerable ante las cosas más sencillas de la vida. Como por ejemplo, la paternidad inesperada y forzosamente aceptada. Representado como una criatura deforme y postrada, como cada uno de los espermios que permitieron engendrarlo. Es sin duda, la aparición de este ser, la manifestación del horror ante todo lo negativo que viene del exterior. Más su único refugio, es el gran universo que reside en su mente. Su única escapatoria, ante el hastío de una vida que no es vida, sino la condena de la existencia más abyecta. ¿No quisiéramos nosotros también escapar de nuestras propias miserias? Aquellas miserias que a nadie mostramos, pues no hay nada peor en el mundo, que vernos tan vulnerables como un bebé que depende del resto para sobrevivir. ¿No quisiéramos todos borrar de nuestras mentes todo aquello que nos ha hecho daño? Podemos escapar de la multitud, de todo aquello que nos impone una sociedad enferma, condenada, pero…. ¿Cómo escapamos de nosotros mismos?

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